Jordi Pujol debe ser el único presidente autonómico que ha tenido
la oportunidad de reunirse con los cuatro presidents de la historia
de Balears. El ex presidente catalán, invitado de lujo del club
Ultima Hora, se reunió en varias ocasiones con Gabriel Cañellas,
tuvo distintos encuentros con Cristòfol Soler, y se entrevistó con
Jaume Matas en su primera etapa al frente del Govern. Durante la
pasada legislatura, Antich recibió a Jordi Pujol en el Consolat de
Mar en la que fue su última visita institucional a Balears como
president de la Generalitat.
Veintitrés años al frente del Generalitat han permitido a Jordi
Pujol mantener fuertes lazos con Balears, tanto a nivel
institucional como políticos por su condición de de líder de
Convergència Democràtica de Catalunya. De hecho, a principios de la
década de los 90 comenzaron a celebrarse las reuniones bilaterales
entre Catalunya y Balears y Jordi Pujol se entrevistó en distintas
ocasiones con Gabriel Cañellas, en Palma y en Barcelona. Pujol
siempre aprovechaba sus visitas a la isla para mantener algún tipo
de encuentro con los representantes de la Obra Cultural Balear.
Pujol ha sido, indiscutiblemente, el presidente amigo de
Balears.
En mayo de 1996, Pujol repitió visita a Palma para presidir una
reunión entre el Govern y la Generalitat. Cristòfol Soler vivía sus
últimos días como president -él todavía no lo sabía- y,
curiosamente, la cumbre que se celebró en Bellver sirvió para hacer
oficial el nombramiento de Catalina Cirer como delegada del
Gobierno en Balears. La conexión entre Pujol y Soler era más que
evidente gracias a la decidida política lingüística que impulsaba
el entonces presidente de Balears.
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