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La teniente de alcalde de Medi Ambient del Ajuntament de Palma y presidenta de Emaya, la popular Catalina Terrassa, dio a conocer ayer que desde marzo del pasado año la empresa municipal ha instalado en Ciutat 20 «caniparcs» en solares o zonas verdes de titularidad municipal. La iniciativa fue puesta en marcha en el marco del plan de limpieza de Palma.

Estos habitáculos disponen de una extensión mínima de entre 40 y 60 metros cuadrados, y cuentan con vallas de protección y carteles alusivos al cuidado de las mascotas.

«Desde que se inició la colocación de estos recintos especiales, hemos recibido muchas peticiones para seguir ampliando su número, tanto por parte de asociaciones vecinales como de particulares», destacó Terrassa, quien recordó que la intención del Consistorio palmesano es continuar poniendo en funcionamiento nuevos «caniparcs».

De hecho, en principio está previsto instalar como mínimo uno en cada barriada de Palma, sin descartar la colocación de más recintos en una misma zona en función de la superficie y necesidades de la misma.

Dichos recintos están pensados básicamente para que los animales de compañía puedan hacer sus necesidades en ellos, evitando así que depositen los excrementos en las calles de la ciudad.

Terrassa indicó que los nuevos «caniparcs», en los que está prohibida la entrada de los niños por razones de seguridad, permanecen abiertos las veinticuatro horas del día. Para mejorar las condiciones de los mismos, se contempla la plantación de árboles, que proporcionan sombra al lugar elegido y a los propios animales.

Con el propósito de facilitar a los dueños de los animales la labor de limpieza, se han situado en la entrada de los recintos unos «sanecans» con bolsas, para que aquéllos puedan recoger los excrementos y depositarlos allí, ya que los propietarios tienen la obligación y la responsabilidad de recoger las heces de sus mascotas.

Emaya, por su parte, ha encargado a los controladores medioambientales las labores de vigilancia y control de estos recintos.