«Soy defensora de la vida privada de la gente»

-¿Por qué?
-No lo sé... Bueno, sí; tal vez porque para esta vez he ido mejor preparada. A causa del mucho ejercicio que he hecho, mi cuerpo estaba en mejores condiciones que en las veces anteriores.

-¿Se hizo usted el peinado que lució?
-No. Me lo hizo mi amiga Malga, que, además, estuvo toda la noche apoyándome y dándome ánimos.

-¿Qué medidas tiene?
-90 - 61- 88

-¿Y eso está bien?
-Más o menos, sí. Yo me veo bien.

-¿Tiene novio?
-Hay algo, pero tampoco hay mucho. Es decir, está conmigo, pero tampoco lo está. Es... ¡Un lío!

-Acláramelo, venga.
-Está preparando una oposición y pasa mucho tiempo estudiando, por lo que no le veo.

-¿Oposición, a qué?
-A bombero.

-¡Jo con los bomberos! ¿Qué les ven?
-Oiga, que no es bombero todavía. Y cuando le conocí ni sabía que lo quería ser...

-Pero algo tienen los bomberos, eh. Algo de ellos, manguera aparte, sí que les gusta.
-Manguera, casco, el que arriesgan su vida por los demás... El bombero es fuerte, duro y romántico.

-¿Y es así su futuro bombero?
-Digamos que sí.

-¿Le gusta el cine romántico?
-El romántico, el de terror y la comedia.

-¿Y el porno, le gusta? ¿Ve películas porno aunque sea en el vídeo de casa?
-No me gusta. Lo odio.

-Veamos, ¿se imagina en «Gran Hermano»?
-No, porque jamás entraría en esa casa.

-¿Siguió la muerte del Papa?
-No mucho, ya que el trabajo me tiene muy ocupada durante el día.

-¿Le gustaría ser famosa?
-Me gustaría hasta que empezaran a agobiarme. A partir de ahí, no. Soy defensora de la vida privada de la gente.

-¿Le gustaría casarse...?
-Y tener varios hijos.

-¿Que es lo que más les gusta a los chicos de usted? No me diga los ojos, ni el pelo...
-Algunos dicen que mi culo, pero yo no estoy de acuerdo. A mi me gusta más mi pecho, por ejemplo.

Pedro Prieto