En plena Guerra Civil española, con republicanos y nacionales
peleándose por el poder, un grupo de profesores, entre los que
había algunos mallorquines residentes en Catalunya, decidieron huir
de España por los Pirineos. Buscaban la libertad que no tendrían en
su país si Franco vencía. Sin embargo, el destino les deparó otra
batalla en las playas francesas, en las que vivieron en condiciones
infrahumanas en campos de refugiados. Ahora, más de 65 años
después, un grupo de estudiantes de Pedagogía de la UIB ha
recuperado el itinerario que hicieron estos docentes, los
denominados «maestros del exilio».
Todo comenzó hace poco más de un año cuando Salomó Marquès,
catedrático de Teoría e Historia de la Universidad de Girona,
estuvo en la UIB impartiendo un seminario teórico a los alumnos de
la asignatura Història de l'Educación Catalana contemporánea de
Pedagogía. El profesor debía explicarles lo que supuso la guerra en
Catalunya. Sin embargo, hubo algunos aspectos que a las alumnas les
interesó en especial: un movimiento que aquí se desconocía, la
«ruta de los maestros».
El seminario y el curso 2003-2004 acabaron, pero la idea de
realizar ese camino para revivir el pasado siguió en las mentes de
diez alumnas. Marquès prometió avisarlas cuando fuera a realizar un
recorrido que ya había hecho muchas veces. El catedrático no faltó
a su compromiso. Hace unos meses se puso en contacto con Xisca
Comas, profesora de Pedagogía de la UIB, para que sus alumnas
viajaran a Girona en febrero, el mes en que comenzó dicha ruta.
La idea era revivir las mismas condiciones atmosféricas que
soportaron los exiliados, sin embargo, por motivos de calendario,
se tuvo que posponer el viaje, financiado por ellas mismas -a la
espera de que les concedan unas ayudas-, hasta el 1 de abril.
Desde Girona, el grupo al completo, (con Comas y Xavier
Montilla, profesores de la UIB y Salomó Marqués) se embarcó en el
itinerario. Un equipo de la televisión catalana Canal 33 les
acompañaba para fraguar su posterior reportaje. El toque de diana
fue a las 8.00 horas. Poco después ya estaban en Agullana, cerca de
la frontera francesa, que fue la primera parada. Un pequeño pueblo
en el que Salomó puso en antecedentes al grupo repartiendo
información con cartas de los exiliados. La siguiente parada fue en
La Vajol, un lugar fronterizo donde pasaron muchos de los
exiliados. El itinerario siguió con Mas Perxes, en el que se
escondieron políticos catalanes y españoles que huían de las tropas
franquistas.
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