Los inspectores de trabajo se encierran para reclamar mejoras salariales y medios

Los inspectores y subinspectores de Trabajo y Seguridad Social se encerraron ayer en el edificio de la Administración Periférica del Estado, el Polígono de Levante, para solicitar mejoras salariales y una mayor dotación de medios para poder cumplir con los objetivos marcados, en una movilización convocada a nivel estatal que culminará próximo 21 de junio con un huelga y una concentración frente a la sede del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales en Madrid. El sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social denuncia una «total y absoluta falta de medios laborales y personales para llevar a cabo nuestra labor». Afirman que el Gobierno anunció un plan de potenciación de la inspección de trabajo «y no han hecho nada» en un año. En concreto denuncian la falta de vehículos, despachos e incluso de medios informáticos. El sindicato asegura que esta falta de medios impide ejecutar las campañas y objetivos en materia de prevención de riesgos laborales o de extranjeros marcados por el Gobierno que, aseguran, «son inviables».

Afirman, como ejemplo, que el Gobierno ha marcado para este año un objetivo 200.000 actuaciones inspectoras en materia de extranjería en el conjunto de España, cuando el año pasado se realizaron 34.000. Este crecimiento de objetivos, afirman, no ha ido acompañado de un incremento de plantilla ni tampoco de medios, y sí de una reducción del salario de los funcionarios. El Sindicato de Inspectores de Trabajo denuncian que el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales eliminó en julio de 2004 parte del plus de productividad a los funcionarios, lo cual ha reducido sus sueldos en aproximadamente 200 euros mensuales. Afirman que el único motivo que les han dado es que no hay dinero suficiente para pagar este complemento de productividad.