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La fiesta del Sant Crist de La Sang tuvo ayer tarde su acto central con la misa solemne concelebrada que presidió el obispo de Mallorca, Jesús Murgui, seguida por muchos devotos que abarrotaron el templo de la Anunciación.

La imagen de La Sang lució sus mejores galas -faldón grana y oro- y arropado por multitud de centros florales. Entre los asistentes se encontraban la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar; el conseller d'Economía i Hisenda, Lluís Ramis de Ayreflor; el regidor Javier Rodrigo de Santos y el presidente de la Asociación de Cofradías de Penitentes, Tomás Darder.

El obispo Jesús Murgui estuvo asistido por el prior de La Sang, Jaume Rovira, y los sacerdotes Ricardo Ramos, Juan Torrens - que actuó como maestro de ceremonias-, Francisco Cobo, Miquel Sastre y Miquel Ramón.

Durante la misa intervino en la parte musical el coro de Antics Blavets, dirigido por Joan Vicenç Rubí y actuó como turiferario el teatino Juan Barceló. En el camarín del Sant Crist se vistió el altar mayor con un mantel bordado en punto de cruz de nueva factura, obra de la artesana Margarita Socías.

Poco antes de concluir la misa hubo imposición de insignias al nuevo prohom, Alejandro Martínez Oliver, y a los dos nuevos sobreposats, Francisco Castellano García y Daniel Coll Arredondo. El prior Jaume Rovira destacó que «la afluencia de fieles al triduo ha sido numerosa y se ha rozado el lleno en casi todas las eucaristías».