La Sindicatura de Comptes no ha detectado irregularidades en la
fiscalización de las cuentas del Consell de Mallorca
correspondientes al año 2002, aunque sí aprecia errores contables
«pequeños e insignificantes», según aseguró ayer el conseller
d'Hisenda de la institución insular, Miquel Àngel Flaquer.
«No hay descuadres ni falta ni un euro, cosa que igual no podrán
decir otras instituciones», señaló el conseller sin especificar a
quién se refería. Como prueba de que la fiscalización es correcta,
el conseller señaló que el informe referido al Consell de Mallorca
no requerirá la supervisión del Tribunal de Cuentas.
El conseller atribuyó los errores contables al aumento
presupuestario que ha experimentado la institución insular desde
2001. «Eso ha provocado un aumento de las puntas contables y hemos
tenido algunos fallos porque somos humanos», aseguró Flaquer.
El conseller aseguró que todo el equipo del Consell está muy
satisfecho con el resultado de un informe «muy positivo que detecta
cosas mejorables que subsanaremos».
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