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El pleno celebrado ayer en el Ajuntament aprobó de forma definitiva, con los votos a favor del PP y del PSOE, y la abstención de EU-EV y del PSM, la modificación puntual de las ordenanzas municipales de limpieza y de ruidos, lo que permitirá que Cort pueda empezar a aplicar ya una de las medidas más importantes anunciadas el pasado mes de abril para intentar paliar los efectos nocivos del 'botellón'.

Por otra parte, el equipo de gobierno, que preside la popular Catalina Cirer, rechazó una propuesta de EU-EV que pedía que en el centro de la calle Jacint Verdaguer se crease un parque. Dicha proposición contó con el apoyo del PSOE y del PSM. Previamente, intervino en el pleno la portavoz de la Plataforma pel Parc de les Vies, Àngels Fermoselle, que recordó que dicha entidad defiende la creación de un bulevar peatonal en el centro de Jacint Verdaguer en lugar de los tres carriles de circulación previstos por Cort, iniciativa que calificó como «triste, vulgar, gris y peligrosa». Fermoselle dijo que el PP mantiene una posición «inmovilista y poco dialogante» en este asunto.

En concreto, las personas que hayan sido multadas -doce desde el pasado mes de junio- o lo sean a partir de ahora por incumplir la normativa municipal de limpieza o la de ruidos, o ambas, podrán, una vez resuelto su expediente, evitar el pago de dicha sanción si optan por realizar trabajos comunitarios para la ciudad en alguna empresa municipal, sobre todo en Emaya. El contenido de dichos trabajos se concretará una vez que los dos textos aprobados ayer sean publicados en el Butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) y que se haya redactado un decreto municipal autorizando su realización.

Cabe recordar que la ordenanza de limpieza establece que por una falta leve se puede imponer una sanción de entre 0 y 300 euros, y que por una grave se puede poner una multa de entre 301 y 900 euros. En cuanto a la ordenanza contra los ruidos, por una falta leve se puede sancionar con entre 0 y 150 euros, mientras que por una falta grave se puede multar con entre 151 y 300 euros.

La campaña sancionadora y de control contra los efectos del 'botellón' empezó el pasado mes de junio, tras haberse realizado en mayo una campaña informativa.

Por su parte, el regidor de Trànsit i Transports, epopular Àlvaro Gijón, rechazó las críticas formuladas por Fermoselle y por los ediles José A. Santos -PSOE-, Marisol Fernández -EU-EV- y Pere Muñoz -PSM-, y reiteró que el proyecto que defiende el equipo de gobierno «es bueno para todos los ciudadanos de Palma y además aumenta el espacio verde que hay ahora en la zona».