Jaume Matas, Francesc Antich y Francina Armengol, ayer en el Consolat de la Mar. Foto: SEBASTIÀ AMENGUAL

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Jaume Matas quiere que el Estatut recoja el modelo de financiación de Balears si así lo recogen los de otras comunidades autónomas -concretamente, el de Catalunya- y Francesc Antich pretende que se incluya una referencia clara al modelo audiovisual de Balears.

Estos dos asuntos separan al Govern y al primer partido de la oposición, como ayer se puso de manifiesto en la primera reunión sobre la reforma estatutaria.

Matas y Antich, tras más de dos horas de reunión, comparecieron por separado ante los medios de comunicación. Los dos quisieron aparentar que la reunión había sido positiva y que era un buen principio. Pero tras las declaraciones de uno y otro, las diferencias aparecieron claramente.

La más clara, la conveniencia o no de que el Estatut recoja el sistema de financiación. En su intervención, el president del Govern aseguró que no tiene «ningún inconveniente» en desligar el debate de la reforma del Estatut del de la financiación, pero apuntó que si hay otras comunidades -en alusión a Catalunya- que sí incorporan esta cuestión en su modificación estatutaria, no se quedará atrás.

Las Islas no permitirán que alguien se lleve «un trozo más grande de la tarta a costa de Balears», dijo el jefe del Ejecutivo autonómico, quien señaló que precisamente una de las razones de ser de la reforma del Estatut es que no haya más diferencias entre comunidades que las que existen ahora y mejorar la posición de las Islas respecto al conjunto del Estado.

El secretario general socialista se mostró contrario a que el sistema de financiación balear quede «acotado» en el Estatut, en primer lugar porque resta margen de maniobra para negociar y en segundo porque considera que Balears puede conseguir más en una discusión «multilateral». con todas las comunidades.