Media docena de miembros de las Joventuts de Esquerra Republicana
de Catalunya (JERC) expresaron ayer, 12 de octubre, en Palma su
desacuerdo con la fiesta del Día de la Hispanidad, desplegando una
gran bandera estelada (independentista) en las escaleras de la
Plaça Major, además de carteles con el lema «Res a celebrar» y una
bandera española tachada.
Un portavoz de las JERC, Andreu Oliver, manifestó que «con este
acto queremos expresar nuestro rechazo al Día de la Hispanidad, que
es un acto fascista que celebra uno de los mayores genocidios de la
Historia», en referencia a la colonización española en América.
Para Oliver, «el Govern de les Illes Balears debería declarar el
31 de diciembre Diada de Mallorca y el 11 de septiembre, Diada
Nacional dels Països Catalans».
Los presentes aseguraron que la escasa asistencia al acto se
debió a que «no hemos convocado una concentración ni una
manifestación, simplemente hemos organizado un acto reivindicativo.
El Día de la Hispanidad no nos incluye y es una fiesta impuesta a
los Països Catalans».
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