Jaume Salom, presidente de la Federación de Nuevos Mallorquines,
entidad que aglutina a numerosas asociaciones de extranjeros, cree
que «poner el nombre de Conselleria d'Immigració es descriminar
hacia los propios inmigrantes, gente que tiene los mismos derechos
que todos los mallorquines. Hago una sana crítica a la iniciativa
de Matas. Me parece bien que se quiera ayudar a los más
desfavorecidos, pero no separando a los inmigrantes del resto de
los colectivos de la Isla, que también tienen derecho a su propia
consellería, como es el caso de la Tercera Edad´.
`Encarna Pastor, la nueva consellera, me parece una excelente
profesional y una persona de gran corazón. Pero que se intente
relacionar el tema de las casas regionales con una Conselleria de
Immigració no es del todo adecuado. ¿Acaso los inmigrantes
peninsulares no son españoles como todo el mundo?. Otro punto que
falla es el competencial. Las competencias en 'papeles' dependen de
Extranjería, es decir, del Gobierno Central. Esto sólo puede
confundir al extranjero, que tendrá que pasar por unas oficinas
para que al final, le destinen a donde siempre´.
`Por otra parte, poner en marcha una consellería supone un gran
gasto burocrático. Mucho dinero se pierde por el camino. Por eso
creo que bastaría una dirección general. Propongo que se cambie el
nombre de 'inmigració' por el más adecuado Conselleria de
Cooperació, destinado a todas las personas con problemas
sociales».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.