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LUCIANA AVERSA /
JAIME MOREDA
Patadas, empujones y amenazas a periodistas y vecinos de la localidad ibicenca de Sant Miquel. Ése fue el comportamiento de los empleados de seguridad privada que el piloto de Super Bikes Fonsi Nieto contrató para proteger la exclusiva que había firmado para la celebración de su boda con la modelo Ariadne Artiles.

El enlace estaba fijado para las dos de la tarde, pero los conflictos comenzaron por la mañana, cuando más de 20 empleados de seguridad privada llegaron al lugar con una cinta de precinto del Ajuntament de Sant Joan con el objetivo de cerrar al público los locales anexos a la iglesia (un estanco y una tienda de souvenirs) que, como cualquier día laborable, trabajan con el turismo que se acerca a visitar esta parroquia del siglo XIV.

Inmediatamente las quejas de los propietarios se hicieron oír ante el Ajuntament y el precinto quedó sin efecto.

La misma iglesia fue otro de los puntos fuertes de la polémica, ya que los tres arcos de la entrada fueron cubiertos con grandes sábanas blancas para que ninguna imagen del enlace se filtrara a la prensa. Sólo los fotógrafos y redactores de la revista «¡Hola!», que al parecer ha pagado 480.000 euros por la exclusiva de la boda y la posterior luna de miel, pudieron trabajar sin problemas.

Fonsi Nieto, quien días atrás había logrado una orden del Ajuntament para cerrar al tráfico la subida a la iglesia, llegó a bordo de un Audi A6. Poco después lo hacía su novia, ésta en un BMW también con los cristales tintados, que chocó con una de las paredes de la entrada a la iglesia.

El enlace religioso fue una ceremonia muy íntima a la que sólo acudieron unos 30 invitados. Entre ellos se encontraba Nati Abascal, que llegó a la iglesia en vaqueros y zapatillas de deporte, para cambiarse en el interior de la misma, y Àngel Nieto, tío del novio.

Tras la ceremonia, el párroco encargado de oficiar la boda, Vicente Ribas, declaró que ni los novios ni la seguridad privada habían obtenido los permisos para impedir la entrada del público en la iglesia.

La fiesta se celebró por la tarde, en el agroturismo Atzaró, donde acudieron unos 400 invitados, entre ellos Colate Vallejo Nájera y Paulina Rubio, y los modelos Almudena Fernández y su novio, Cameron. Otro de los famosos que asistieron al enlace fue Nacho Cano, quien al parecer compuso una canción para los novios.

El comienzo del cóctel estaba previsto para las siete de la tarde, pero hasta las siete y media no aparecieron los primeros invitados y dos horas más tarde continuaban llegando coches al idílico lugar.

Fonsi Nieto salió un momento con una botella de champán francés (una camarera llevaba una bandeja con copas y otra con canapés) y tras decir a los periodistas que él no se había enterado de los altercados ocurridos por la mañana, quiso brindar con la prensa, pero ninguno de los reporteros accedió a levantar la copa con él.