Unas 2.000 personas se dieron cita ayer a primera hora en el Germans Escalas de Palma para despedir esta celebración musulmana. Foto: SEBASTIÀ AMENGUAL

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Más de 2.000 musulmanes se reunieron ayer, a partir de las 8.30 de la mañana, en el Poliesportiu Germans Escalas de Palma, para celebrar con un rezo el fin del Ramadán, que supone para los musulmanes una época de placidez y reencuentro. La comunidad musulmana de Mallorca celebró ayer el fin del mes del ayuno en diversos actos multitudinarios por distintos puntos de la Isla. Los congregados en Son Gotleu cantaron las oraciones que marcan el inicio de la llamada fiesta del Eid El Fitr, o «fiesta del almuerzo».

El rezo, en dirección a la Meca, duró aproximadamente media hora. A las 9.00 el acto había acabado, mientras se repartían bolsas de magdalenas para comer: había que reponer fuerzas. La fiesta acababa de comenzar. Horas más tarde, en las casas de las familias, se sirvían comidas como el «Meloui» o el «Mefrouk», hecho de harina, sal y mojado con aceite. Las comunidades musulmanas de Inca, Muro o sa Pobla también celebraron este importante día, a partir del cual ya se puede comer con normalidad. La aparición del creciente lunar en los cielos de Oriente Medio marca para los musulmanes el fin del mes sagrado del ayuno Ramadán y el inicio de esta celebración.

La nueva consellera d'Immigració i Cooperació, Encarnación Pastor, envió un saludo a los congregados en el Germans Escalas, que transmitió el Imam. Lunis Meziani, presidente de la Asociación Islámica Cultural de las Illes Balears, dijo que «agradecemos su recuerdo a los musulmanes en este día tan señalado. La consellera debe saber que puede contar con nosotros». Yousef Jouihri, miembro de la Federación de Inmigrantes de les Illes Balears, había participado también en la ceremonia: «Es increíble toda la gente que ha venido. No sólo gente de Palma, sino de pueblos».

Toni Limongi