Juan Mestre13/01/06 0:00
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El ex canciller alemán Helmut Kohl pronosticó ayer en Palma, durante la conferencia organizada por la Fundación Iberostar en el Pueblo Español, que el futuro de Europa será muy positivo y que España tendrá mucha influencia. Kohl se mostró reacio a la entrada en la UE de Turquía por no respetar los derechos humanos y dijo que los países grandes de Europa deben respetar a los pequeños. Durante su conferencia, Kohl vaticinó que dentro de 10 o 15 años el euro podrá utilizarse en la City londinense. «No hubo ningún líder europeo que defendiese la unidad de Alemania como lo hizo Felipe González. Tatcher, en cambio, me dijo que prefería dos Alemanias a una Alemania fuerte. El apoyo de González fue inequívoco». Estas fueron las primeras palabras pronunciadas por Kohl en la conferencia pronunciada en el Pueblo Español, donde el ex canciller alemán se erigió como un firme defensor de la unidad europea. «No se dejen impresionar por las visiones catastrofistas que vaticinan el fin de Europa. Se insiste más en las dificultades, pero los problemas siempre pueden resolverse», aseguró el político germano.

Kohl recordó que España, desde que entrase en la Unión Europea en 1986, se ha convertido en uno de los países europeos con un mayor crecimento económico. «La prosperidad económica de España me llena de admiración y me da envidia como alemán», apuntó Kohl, quien recordó que en los años 80 se hablaba de «euroesclerosis, como si fuese una enfermedad terrible». «El escepticismo se apoderó de los líderes europeos y faltaba explicar a los jóvenes que aquella era su Europa», sentenció. Kohl destacó que «todo el mundo que critique a Europa no debe olvidar que nunca más habrá una guerra entre pueblos europeos».

Para Kohl, la ampliación de la Unión Europea traerá ventajas, pero aún falta tiempo. «La moneda únida ha constituido un verdadero hito», comentó el ex canciller alemán, quién agregó: «estoy convencido que dentro de 10 o 15 años ya podremos pagar en euros en la City de Londres. La economía británica lo va a exigir y también podremos pagar en euros en Zurich». En cambio, Kohl se mostró pesimista ante la pretensión de Turquía de entrar en la Unión Europea. «Si Chirac abre la puerta de la UE a Turquía dentro de un año ya no será presidente de Francia», afirmó. Para Helmut Kohl, Turquía debe respetar los derechos humanos, aunque aclaró que «soy amigo de los turcos, pero hay derechos fundamentales que no se respetan y es muy importante la libertad religiosa». Kohl cuestionó también que los países más grandes de la Unión Europea puedan juzgar a los más pequeños.