Las instituciones y entidades de Balears reaccionaron ayer unánimemente contra el terrorismo horas después del asesinato del ex concejal socialista de Mondragón Isaías Carrasco. Las principales autoridades de Balears, representantes de sindicatos, de la patronal y del Gobierno central se reunieron en el Parlament para condenar el asesinato. En una declaración institucional, el president del Govern, Francesc Antich, aseguró que el atentado «muestra la voluntad de ETA de entorpecer la vida democrática del país». «Muestra la desesperación contra la expresión de los derechos de los ciudadanos, que el domingo se manifestarán en las urnas en unas elecciones libres y democráticas», dijo Antich, que estaba acompañado por la presidenta del Parlament, Maria Antònia Munar; la jefa de la oposición, Rosa Estaràs; la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol; el delegado del Gobierno, Ramon Socías, y la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, entre otras autoridades.
Antich añadió en la declaración que «todas las instituciones de Balears, las organizaciones políticas y sociales, queremos expresar nuestro más profundo rechazo y condena de este atentado». El president del Govern recalcó que «ahora más que nunca las instituciones y entidades que firmamos este mensaje nos reafirmamos en nuestro compromiso de garantizar que los instrumentos democráticos sean el único marco para la convivencia». «ETA no conseguirá impedir que el próximo domingo los ciudadanos ejerzan sus derechos democráticos con libertad y serenidad», planteó Antich, que pidió un minuto de silencio en memoria del ex concejal socialista asesinado en Mondragón.
Previamente, la presidenta del PP balear, Rosa Estaràs, manifestó su «condena más absoluta» al atentado y subrayó que ETA ha de saber «que no marcará las agendas políticas» y que sólo se puede combatir el terrorismo «con la Ley y la fuerza del Estado de Derecho». Pere Sampol, candidato de Unitat al Congreso, condenó el atentado y pidió a los ciudadanos que acudan a votar. «Nos gustaría pensar que la gente es lo suficientemente madura como para no caer en la trampa de los terroristas y no se dejen influir por ellos», dijo Sampol, quien no quiso hablar sobre «a qué candidatura favorece» el atentado.
Por su parte Marisol Ramírez, cabeza de lista de Esquerra Unida-Els Verds, no logró ayer sustraerse al llanto durante su breve comparecencia ante los medios informativos para condenar el atentado de ETA, y señaló que «la dictadura del terrorismo nos ha roto la alegría». Entre sollozos Ramírez afirmó que «la mejor manera de responder a un asesinato como éste es la respuesta masiva de la gente a las balas con el voto en conciencia».
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