P. Candia08/03/08 0:00
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La huelga indefinida que desde el pasado 4 de febrero mantienen los funcionarios de Justicia de Balears en demanda de una equiparación salarial con sus colegas de las comunidades autónomas con las competencias ya transferidas, ha aplazado más de 10.000 juicios y asuntos en las Islas, según el cálculo realizado ayer por los portavoces sindicales. Ante la escasa perspectiva de que se llegue a una solución en el conflicto -el Ministerio de Justicia no ha cedido un ápice- los trabajadores ya se han situado en el peor de los escenarios y se preparan para resistir «hasta el final».

Un grupo de trabajadores exhibió ayer en Vía Alemania una hucha para recibir donativos (ver fotografía en esta misma página), en una clara demostración de que no cejarán en sus reivindicaciones.

Todo ello, ante la parálisis casi absoluta en el desarrollo de la actividad judicial.
El presidente de CSI-CSIF Balears, Andrés Bou, afirmó ayer que el Ministerio de Justicia es el «principal responsable» de que todavía no se haya acordado la desconvocatoria de la huelga que mantienen los funcionarios de los organismos de Justicia de las Comunidades Autónomas que no cuentan con las competencias transferidas. Así lo aseguró en declaraciones a Europa Press tras participar en una concentración que han llevado a cabo a más de un centenar de trabajadores ante la sede de la Audiencia Nacional en Madrid y que les llevó a cortar la calle Génova de Madrid durante unos 30 minutos.

Según los cálculos de los sindicatos convocantes (CCOO, UGT, CSI-CSIF y STAJ), los trabajadores del resto de regiones ganan de media 200 euros más al mes que sus compañeros, lo que supone una diferencia de 2.400 euros al año. El Ministerio de Justicia y los sindicatos CC OO, CSI-CSIF, UGT y STAJ, convocantes de la huelga indefinida que comenzó el pasado 4 de febrero en la Administración de Justicia no transferida, no lograron alcanzar un acuerdo en la décima reunión que han mantenido el jueves para poner fin a la protesta. En esa reunión, los trabajadores de Balears estuvieron representados por sus portavoces sindicales.