La alcaldesa de Palma, la socialista Aina Calvo, dio a conocer ayer que renuncia a su cargo como máxima responsable en Urbanisme, y anunció que a partir de la próxima semana será sustituida por Yolanda Garví, que hasta ahora era la gerente de este departamento. Garví pasará a ser la tercera regidora no electa del actual equipo de gobierno, junto con el regidor de Habitatge, José Manuel Gómez, del Bloc, cuya área seguirá dependiendo de Urbanisme, y el regidor de Joventut i Esports, Baldomero Oliver, de UM.
Calvo también confirmó que el nuevo regidor electo Francisco Donate pasará a ser el nuevo responsable de Infraestructures, en sustitución de Andreu Ferrer, que pasará a dirigir Contractació i Govern Interior, que dependerá de Infraestructures, al igual que Salut, que dirige la edil socialista Begoña Sánchez.
Con esta remodelación, Donate y Garví entrarán a formar parte de la Junta de Govern municipal, mientras que Ferrer dejará de pertenecer a la misma. Calvo añadió que con todos estos cambios se podrá conseguir un trabajo «más coordinado e intenso» entre Urbanisme, Infraestructures y Mobilitat, que dirige el regidor socialista Joaquín Rodríguez.
Calvo justificó su decisión de abandonar Urbanisme, de forma implícita, en la imposibilidad de gestionar esta área y ser a la vez alcaldesa. «Ha sido un año de trabajo muy intenso», señaló, y recordó el inicio de las obras del Palacio de Congresos o las actuaciones previstas en la fachada marítima.
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