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La regidora de Urbanisme, Yolanda Garví, y el arquitecto Antoni Barceló presentaron ayer la propuesta de modificación puntual del Pla General d'Ordenació Urbana (PGOU) de Palma para el proyecto de la fachada marítima, modificación que será aprobada hoy jueves de manera inicial en la Gerència d'Urbanisme.

El siguiente paso será la aprobación de dicha modificación en la Junta de Govern del 25 de junio, y luego en un pleno que deberá tener lugar antes del 15 de julio, ya que el próximo 16 de julio concluirá el plazo de un año fijado por el nuevo equipo de gobierno de suspensión cautelar de la concesión de licencias en el ámbito de la fachada marítima. A continuación, se abrirá un plazo de 45 días para presentar alegaciones. Garví añadió que la citada modificación puntual del PGOU podría ser aprobada de manera ya definitiva, en principio, dentro de un año.

La propuesta presentada ayer abarca un ámbito de actuación de 70.300 metros cuadrados en total, 40.000 de ellos en primera línea y los 30.000 metros cuadrados restantes en segunda línea, en solares de titularidad municipal.

Por lo que respecta a los citados 40.000 metros cuadrados, que serán de espacio libre público, unos 36.000 metros cuadrados corresponderán al parque previsto por el nuevo equipo de gobierno, mientras que los 4.000 metros cuadrados restantes se destinarán a equipamientos públicos, si bien en estos momentos aún no se ha determinado cuáles serían. Asimismo, está prevista la creación de un párking subterráneo disuasorio, de 925 plazas para coches y 200 para motos.

El pasado 11 de marzo, la alcaldesa de Palma, la socialista Aina Calvo, y los portavoces del Bloc y de UM en Cort, Eberhard Grosske y Miquel Nadal, respectivamente, habían presentado ya un avance de la citada propuesta, al que se presentaron 68 alegaciones.

Cabe recordar que en primera línea se ubica también el edificio de GESA y que asimismo se construirá en ella el Palacio de Congresos y el hotel ya previstos.

Por lo que se refiere a la segunda línea, Garví indicó que está previsto aplicar el proyecto de reparcelación firmado meses atrás, que supondría que la empresa Núñez y Navarro, que posee tres solares en primera línea, y Mapfre, que cuenta con uno, podrían ejecutar sus proyectos originarios de construcción de viviendas en otro espacio, en concreto, en los solares municipales ubicados en el Polígon de Llevant.