El protagonismo de la calle marcó las dos tomas de posesión de Francesc Antich

La primera vez todo era nuevo, nunca se había visto en Balears a un socialista asumir la presidencia del Govern. Hace un año, todo tuvo algo de 'deja vu', como si todo se hubiera vivido antes. Y así había sido. Dos veces, con ocho años de diferencia, ha prometido su cargo de president el socialista Francesc Antich. La primera vez, una tarde en que se vio a gente llorar de emoción, Antich apeló al «protagonismo del pueblo» en una toma de posesión multitudinaria. La segunda vez, hace un año, hizo un llamamiento para repensar Balears.

Las dos ceremonias fueron prácticamente idénticas. Hasta el punto que resulta difícil distinguir una de las otra.
La primera vez, al igual que hace un año, Francesc Antich había previsto prometer su cargo a las 19 horas en La Lonja. Sólo que, surgió un «pequeño problema»: el Rey iniciaba ese día, 27 de julio de 1999, sus vacaciones estivales y el protocolo obligaba a que le recibiera «el president».

El mensaje de Zarzuela se recibió en el Consolat de la Mar el día anterior. Antich prometió su cargo, casi en la intimidad (con el entonces ministro de Administraciones Públicas, Àngel Acebes), y su primer acto fue ir a esperar al monarca. Pero se mantuvo la ceremonia de las siete de la tarde. Hace un año sí, fue el escenario de la toma de posesión.

A una Lonja abarrrotada de público, tanto en 1999 como en 2007, Antich llegó escoltado por maceros del Consell y lanceros de Cort. El jefe de Protocolo anunció la entrada de Antich. La primera vez dijo : «Les habla el president de les Illes Balears», ya que había prometido antes su cargo, y Antich se dirigió por primera vez como president a las personas allá congregadas. Frente al escenario estaban sentados los integrantes de su primer Govern. Leyó los decretos de nombramiento y citó sus nombres. La segunda, explicó el sentido de la ceremonia.

Como hace ocho años, en su primera toma de posesión y en el mismo escenario, la calle adquirió un protagonismo especial en la ceremonia. Un acto con un protocolo diferente a las que se celebran en otras comunidades y que incluyó la firma, ante el público, del decreto de nombramiento de los hombres y mujeres que formarían parte del Govern. Fuentes del Consolat han explicado que este tipo de ceremonias, donde se unen toma de posesión y nombramiento del Govern sólo se dan en Balears, por iniciativa de Antich.

Hace un año, el discurso de Antich, tras prometer su cargo, fue un guiño total hacia las clases medias y la juventud, a quienes dio un protagonismo principal en su futura acción de gobierno.

El president, recibido en Sa Llonja con un aplauso que se prolongó durante cinco minutos (casi diez, ocho años atrás) brindó a toda la ciudadanía la oportunidad de «repensar juntos el país» en alusión a Balears.

Finalizado el discurso, se sirvió un cóctel en el patio que comunica con el Consolat de la Mar.