Los pisos de segunda mano más caros en el área metropolitana de Palma están situados en Bendinat (Clavià), con unos precios de 4.389 euros por metro cuadrado, mientras que los nuevos se sitúan en la zona del Passeig Mallorca de Palma, con valores de 4.180 euros por metro, según indica la estadística de precios elaborada por el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Balears (API).
De acuerdo con los datos recogidos por los intermediarios inmobiliarios, las zonas con las viviendas más baratas en la capital balear están ubicadas en las inmediaciones del Estadio Balear, en la Vía de Cintura, con precios medios de 1.749 euros por metro cuadrado.
El Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria asegura que los precios de la vivienda nueva no bajarán a corto plazo en Balears pese a la paralización de las ventas aunque constatan que sí se producirán «algunos ajustes» en los valores de la vivienda de segunda mano, tal y como ya reflejan la mayoría de estadísticas inmobiliarias. Por el contrario, la patronal de los vendedores de pisos estima que los precios de los pisos se han 'reajustado' a la baja hasta niveles cercanos un 30 por ciento a la baja en España.
Tal y como afirmó el presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Balears, José Oliver Roca, «los compradores e inversores están esperando que los precios bajen y se produce un 'tour de force' con los vendedores». En todo caso, los intermediarios inmobiliarios de las Islas afirman que los precios inmobiliarios han subido un 6'4 por ciento en el primer semestre del año, de acuerdo con sus propias estadísticas.
El Colegio de API de Balears estima que la paralización de las ventas inmobiliarias se prolongará al menos por un periodo de un año y medio o dos, al tiempo que consideran que la crisis inmobiliaria tendrá un impacto económico menor en las Islas que en el conjunto de España debido a que la actividad turística sigue funcionando como colchón de la economía balear.
Al mismo tiempo, el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Balears considera que el Govern debe tomar medidas urgentes para dinamizar el mercado inmobiliario y contribuir a satisfacer la demanda de vivienda que existe en las Islas. A su juicio, tal y como afirmó recientemente José Oliver Roca, el Ejecutivo autonómico debería de potenciar fórmulas como el alquiler, el alquiler con opción a compra y dar ayudas a los compradores con el objetivo de liquidar el «stock» de viviendas nuevas sin vender.
El presidente de los API, que considera esta última medida «más necesaria» que la política de fomento de nueva vivienda de protección oficial que impulsa la administración, estimó el «stock» de pisos sin vender en unos 5.000 en Balears, de los que aproximadamente 2.500 estarían ubicados en el municipio de Palma.
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