El PP anunció ayer en el Parlament, a través del diputado Antoni Pastor, que retira su apoyo al Govern en su política de vivienda. Pastor aseguró que había motivos para invalidar el concurso convocado por el Ejecutivo para obtener suelo con el fin de construir viviendas sociales. En este sentido, el conseller de la Vivienda, Jaume Carbonero, desveló que la construcción de 5.000 VPO en Balears generará un movimiento económico de 600 millones de euros en el sector de la construcción.
Pastor reconoció que el PP había apoyado la ley de la vivienda, que la votó a favor y que incluso la calificó de histórica. «Nosotros pensábamos que quería consensuar una política de vivienda, pero fuimos un poco ingenuos», acusó Pastor.
El diputado del grupo popular calificó de «derroche» de dinero público la compra de edificios para convertirlos en viviendas sociales. Y citó el caso de Campos. Según Pastor, ni el alcalde del municipio estaba de acuerdo con la compra de estas viviendas. También criticó que se hiciesen varias instrucciones desde la Conselleria de la Vivienda para aclarar aspectos relacionados con el concurso.
El conseller Carbonero recordó que la ley fue aprobada para compensar las dificultades del sector de la construcción. «Ahora estamos en una situación peor porque es difícil obtener un crédito hipotecario», precisó.
El conseller de la Vivienda dijo que era una buena noticia ante la actual situación económica que la construcción de 5.000 viviendas sociales vaya suponer un movimiento económico de 600 millones de euros. Sobre la compra de viviendas en Campos, Carbonero aseguró que el alcalde -Guillem Ginard- sí apoyaba la compra de estas viviendas.
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