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V. MALAGÓN / P. CANDIA La mayor de las empresas de Vicenç Grande, Binipuntiró no puede hacer frente a sus deudas a corto plazo. La empresa, cuyos activos ascienden a más de 536 millones de euros -68 más que su deuda total-, apenas tiene poco más de cuatro millones de euros en tesorería; es decir, un 0'78% de su valor total. La mayor parte de los bienes de la empresa son sus construcciones, que valen casi 458 millones de euros, según los datos del informe elaborado por los administradores concursales.

En ese mismo documento se alerta de que además de no tener activos circulantes suficientes para afrontar las deudas a corto plazo, Binipuntiró no tiene capacidad para realizar sus existencias. A estos dos factores se une además el elevado importe que tienen el resto de entidades del grupo con esta compañía, lo que dejan a la mayor empresa del Grupo Drac en una situación de «máxima inestabilidad financiera». En el lado positivo, los administradores señalan que la entidad «no presenta desequilibrio patrimonial alguno desde la constitución de la misma».

El documento también recuerda que para llevar a cabo su actividad, la compañía ha necesitado con frecuencia uso de préstamos financieros. Además, «también ha obtenido financiación por parte de los vendedores en determinadas adquisiciones de suelo rústico y possesions principalmente, si bien, en la mayoría de los casos se ha producido la adquisición con un sobreprecio sobre el valor de tasación». Ese sobrecosto hace ahora más difícil que Binipuntiró pueda ejecutar todos los bienes que posee.

Además del escaso dinero en efectivo que tiene la empresa, también sorprende el tamaño de la plantilla en una compañía de más de quinientos millones de euros. En total son doce los empleados que tenía Binipuntiró a fecha de 22 de julio de 2008, es decir, la fecha en la que se declara el proceso concursal.