La plantada de los gigantes se trasladó a la carpa del Acollinment, a resguardo de la tormenta de aguanieve que azotó durante toda la mañana Lluc.

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El de ayer fue un encuentro de gegants sin precedentes en las Isla. 42 gegants de Balears, Catalunya y hasta Puerto Rico subieron hasta el pie de las cumbres nevadas de Escorca para bailar, para gozo de los más pequeños, a la vista de todos.

Eran las diez de la mañana, hora prevista para la plantada de gegants en el Santuario, cuando un intenso aguacero (mitad agua, mitad nieve) obligaba a trasladar el encuentro a la inmensa carpa del Acolliment. Y es que a los antiguos gegants, especialmente a los de cartón piedra, no les agrada estar en remojo. Así las cosas, algunos permanecieron en el interior de las furgonetas de transporte, y, finalmente, fueron 42 los gegants que desfilaron con sus bailes por Lluc, entre ellos los gegants Treball y Cultura, de la Agrupació Gegantera de Catalunya, y los curiosos personajes del Cercle Internacional de Gegants, llegados desde Puerto Rico de la mano de la agrupación catalana, una oportunidad única para ver, comparar y, por qué no, incluso vestirse una de estas a joyas del arte popular.

Los caparrots de Santa Maria, (los últimos en incorporarse al grupo de gegants y caparrots de Mallorca), pasaron de cabeza en cabeza para gozo y disfrute de los más pequeños. ¿Quién no ha deseado calzarse un caparrot?

Lástima que el mal tiempo obligara a prescindir del vistoso pasacalles en la plaza del Santuario de Lluc, pero la concentración de gegants y caparrots bajo la inmensa carpa del Acolliment contribuyó a incrementar el sentimiento de hermanamiento que ya existe entre las diferentes agrupaciones de la Isla, esta vez con las dos agrupaciones catalanas como auténticos invitados de lujo. lElena Ballestero
(texto y fotos)