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Pollença es el único municipio de Mallorca que conserva la tradición del baile de las Àguilas, un ritual que se repite cada año el domingo siguiente a la fiesta del Corpus y que requiere una cuidadosa preparación con altas medidas de seguridad y es que las jóvenes elegidas para el baile (Neus Cardell y Conchita Calvente este año) llevarán sobre sus capas las más valiosas joyas de Pollença cedidas desinteresadamente para la ocasión por cientos de familias colaboradoras.

Desde el lunes, las familias de las jóvenes acompañadas del pequeño grupo de voluntarios que cuida año tras año de garantizar la continuidad de esta tradición, cose cuidadosamente en la Caixa Colonya de Pollença, bajo la atenta mirada de un guarda de seguridad, todas y cada una de las joyas que durante meses se han ido marcando escrupulosamente con hilos de colores, entre ellas la Verge del Puig, que año tras año presta la Obreria.

Las joyas sólo abandonarán el banco el día de la fiesta, acompañadas de un guarda de seguridad para engalanar el tradicional baile de las Àguilas junto a Joan Pelós.