Como se recordará, el enlace eléctrico submarino entre la Península y las Illes Balears unirá la subestaciones de Morvedre (Sagunto) con la de Santa Ponça-Son Bugadelles (Mallorca), en un trazado que se ha elegido teniendo en cuenta tanto la menor distancia entre la Península y Mallorca como la profundidad y características del suelo submarino.
En concreto, la longitud aproximada del cable alcanzará los 237 kilómetros y la profundidad máxima por la que transitará es de 1.485 metros.
Según informó la compañía, la fabricación y ensayos en fábrica del cable ya han terminado, si bien el tendido se retrasará hasta enero como consecuencia de la disponibilidad de los dos únicos barcos capaces en el mundo de acometer un tendido de estas características, el Skagerrak y el Giulio Verne, una labor que finalizarán en el mes de febrero, de acuerdo con las previsiones.
Red Eléctrica tiene previsto a continuación iniciar un periodo de pruebas que se prolongará a lo largo del verano con el objetivo de que la interconexión este operativa a finales del próximo año.
Cabe recordar que Red Eléctrica adjudicó en mayo de 2007 los contratos de construcción del enlace submarino a la empresa Siemens, como responsable de las estaciones de conversión de Sagunto y Calvià, y al consorcio formado por la empresa italiana Prismyan y a la noruega Nexans, propietarias de los buques, el diseño, la fabricación y tendido de los cables.
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