Francina Armengol, durante la presentación del manifiesto electoral. | Pere Bota

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La socialista Francina Armengol, que opta a la reelección como presidenta del Consell de Mallorca y ocupa el segundo puesto en la lista al Parlament que encabeza Francesc Antich, presumió ayer de «honestidad» y «transparencia» durante la presentación de su Manifiesto electoral.
«Nos presentamos con las manos limpias y la conciencia tranquila», dijo ante candidatos y cargos de su partido, entre ellos el president balear, que le acompañaron en el acto.
«La derecha supone volver al pasado del que quermos salir», dijo Armengol, quien no quiere dejarse llevar por las encuestas que auguran al PP mayoría suficiente para gobernar la institución que ella preside desde 2007.
Políticas sociales
A pesar de las dificultades económicas por la que atraviesan las instituciones por la caída de sus ingresos, Armengol se comprometió a mantener las políticas sociales y recortar gastos sin perjudicar la calidad de los servicios.
El Manifiesto todavía no es el programa electoral, que aún se está elaborando, pero sí recoge algunas propuestas, como crear crear un consorcio entre el Consell y el Ajuntament de Palma para unificar prestaciones sociales, así como impulsar un pacto para que los ayuntamientos de la Isla con más de 20.000 habitantes impulsen un pacto para compartir servicios.
El objetivo de los socialistas para el Consell de Mallorca es claro y su presidenta, y candidata a la reelección, lo dejó claro en varias ocasiones durante su intervención: no volver atrás.