Maria Salom y Mateu Isern, juntos el día en el que la primera tomó posesión del cargo de presidenta del Consell. | S. Amengual

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Los primeros cien días en el Consell de Mallorca y el Ajuntament de Palma han permitido a la presidenta Maria Salom y al alcalde Mateu Isern aprobar ante los ciudadanos, aunque en las decisiones más polémicas en Palma sólo han contado con la aprobación manifiesta de sus votantes. Así se desprende de la encuesta realizada por el Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES) en exclusiva para Ultima Hora

La presidenta del Consell, Maria Salom, ha logrado mejorar ligeramente su nivel de conocimiento, que alcanza ya el 75 por ciento, mientras que en la valoración de su gestión también mejora tres décimas en relación con la obtenida en mayo y ya llegal al 5,8.

El resto de los presidentes insulares, Santiago Tadeo y Vicente Serra, en Menora y Eivissa, respectivamente, alcanzan datos son muy similares.

Evitar duplicidades

En el catálogo de exigencias de los ciudadanos respecto al Consell mallorquín figura como prioritario la lucha contra el paro y la crisis, pero más significativo resulta que figuren también peticiones relacionadas con la supresión de duplicidades competenciales con el Govern y el mantenimiento de ayudas a los ayuntamientos de la Isla.

Dentro de este capítulo, los mallorquines también reclaman a la presidenta del Consell que no reduzca los servicios sociales -la institución es titular de numerosas residencias de la tercera edad- y que mantenga las ayudas al mundo de la cultura. El Consell gestiona el Teatre Principal.

Por el contrario resulta llamativo que los ciudadanos no hagan ninguna referencia a una de las competencias más importantes del Consell, la gestión de la red de carreteras en Mallorca. En este terreno este organismo tiene iniciativas que también han generado una notable polémica ciudadana.