La lluvia sorprendió la tarde del jueves a numerosas personas. g Foto: JAUME MOREY.

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El mes de agosto de 2012 pasará a la historia como el segundo o tercero (dependiendo del observatorio) más caluroso de los últimos 30 años en Mallorca, según informaron ayer desde la delegación territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Balears, aunque puntualizaron que falta contabilizar los datos del día 31 de agosto.

Las temperaturas máximas han sido entre 1,4º y 2,2º más elevadas de lo habitual en esta época del año. El portavoz de la Aemete en Balears, Miguel Gili, destacó que durante el mes pasado se han registrado varias olas de calor; tales como las que tuvieron lugar entre los días 1 y 2 de agosto, la del 9 al 11 y especialmente la que se produjo entre el 17 y 24 de agosto.

Los más calurosos

Los días más calurosos fueron el 21, 22 y 23, cuando las temperaturas máximas estuvieron entre 7º y 8º por encima de lo habitual en esta época del año. Por citar algunos ejemplos, el día 22 de agosto el mercurio llegó a los 39,6º en sa Pobla, que ha sido la temperatura más elevada; mientras que en Llucmajor se llegó a los 38,7º el día 23 del mes pasado.

Aunque no se ha batido ningún récord histórico, sí hay que destacar que no es habitual que haya tantas jornadas sucesivas de calor excesivo.

Respecto a las precipitaciones registradas en agosto, Gili resumió que «el mes se puede considerar, en general, muy seco o extremadamente seco», exceptuando algunas estaciones del sur de Mallorca en las que se registraron lluvias significativas el pasado jueves. En este sentido, cabe destacar que en Andratx cayeron 42 litros de agua por metro cuadrado, en Son Vic Nou (Calvià) se registraron 41,8 litros, de los que 24 litros cayeron en sólo 10 minutos. También se registraron precipitaciones significativas durante la tarde del pasado jueves en Santa Ponça (34 litros), Portopí (22,7 litros en menos de una hora); y en Llucmajor (17 litros en una hora).

Los últimos meses han sido muy secos en Mallorca, ya que llevaba unos 5 meses sin llover de forma significativa; sólo ha habido algunas precipitaciones en forma de barro.