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La sede del Partido Popular en Palma ha vuelto a amanecer hoy con pintadas en su fachada. La organización independentista Arran ha pintado en el muro la siguiente frase: "Qui juga amb foc s'acaba cremant".

La entidad ha emitido un comunicado en el que además de reivindicar la acción de protesta denuncian que el reciente incendio en la Serra de Tramuntana no fue debido únicamente a la imprudencia de un ciudadano irresponsable sino también a los recortes presupuestarios realizados desde el Govern, que han reducido el personal y la prevención. Por ello señalan directamente “els vertaders culpables d'aquesta desgràcia, i advertir-los que no quedaran impunes”.

Distintos miembros del PP han manifestado su rechazo a la acción de Arran a través de las redes sociales. Además, el secretario general del partido, Miquel Vidal, ha lamentado nuevamente que haya una organización que recurra a los actos de vandalismo para manifestar sus críticas hacia un partido político. Vidal ha manifestado que «está claro que todo ciudadano tiene derecho a la libertad de expresión, pero no podemos olvidar que en una democracia ésta no es la mejor forma».

Así, el secretario general ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que condene cualquier tipo de acto que conlleve la violencia como medio de expresión, al tiempo que ha asegurado que «por suerte, no todos los ciudadanos entienden de la misma manera la democracia» y que por ello está convencido de que «es sólo una minoría la que recurre a este tipo de actos para imponer sus criterios».

Finalmente, Vidal ha afirmado que el PP tomará «las medidas que sean necesarias para acabar con estos actos de vandalismo» y ha reiterado que, ante todo, se deben respetar todas y cada una de las opiniones e ideologías porque «vivimos en un Estado de Derecho y la constitución así lo establece».

No es la primera vez que la sede 'popular' sufre un ataque por parte de Arran. La última se registró el pasado mes de abril.