Jaume March, en una imagen de archivo.

TW
177

La Conselleria d'Educació comunicó ayer al director del IES Marratxí la apertura de un expediente disciplinario por falta muy grave por conculcar el derecho a la educación de una alumna durante los días de huelga y por no adoptar una actitud de neutralidad. El expediente parte, por tanto, de la denuncia de una estudiante del centro, que poco después se marchó, y no conlleva aparejadas medidas disciplinarias. Por el momento, ya que el juez instructor –es decir, un inspector– puede decir en cualquier momento interponerlas.

El director reconoce tener la conciencia tranquila, «me comeré el turrón con toda tranquilidad», y espera que «al final, el expediente se sobresea por falta de fundamento» porque «durante la huelga se respetaron los servicios mínimos y el derecho a la educación». De lo contrario, March podría llegar a perder su plaza de funcionario, que es la sanción máxima para una falta muy grave. Y asegura que esta sanción, sobre la que «había rumores», supone una «puñalada por la espalda» para el colectivo de directores, que hace unos días se reunió con los responsables de la Conselleria «y entonces sólo hubo buenas palabras».

March, que dirige el IES Marratxí desde el 2002, calificó de «sospechoso» que el expediente se anuncie justo un día después de la aprobación de la Ley de Símbolos y el último día antes de las vacaciones. «Ya lo hicieron en verano, con el anuncio de expedientes a los directores de Menorca el último día antes de las vacaciones de verano».

Por lo pronto la Assemblea de Docents convocará una asamblea, probablemente el lunes, y sobre la mesa estará la posibilidad de retomar la huelga. Además, más de 70 profesores del instituto firmaron un comunicado de apoyo al director en el que expresan su «preocupación por la deriva autoritaria que se desprende de esta actuación de la Conselleria».

La ELB lo sabía el lunes

El presidente de la Associació de Directores de Secundària, Antoni Morante, aseguró que «se ha roto cualquier posibilidad de diálogo con la Conselleria». «No nos volveremos a reunirnos con ellos. Nos sentimos engañados», aseguró. Morante confirmó que en la reunión mantenida con Educació el día 12 «ambas partes estuvimos de acuerdo en rebajar la tensión para abrir una vía más constructiva, por lo que esto ha sido un mazazo. Parece que la Conselleria está dispuesta a mantener la máxima tensión de manera indefinida», lamentó.

Por último, en el Facebook de la Associació Lliure d'Estudiants, entidad de la que la alumna denunciante es una de sus dirigentes, ya se colgó el día 16 el anunció de la apertura de un expediente a Jaume March.