El juez decano de Madrid dice que la causa contra la Infanta es débil por la oposición de la fiscalía

En una entrevista en la cadena COPE, Armengol ha recordado que cuando el juez instructor del caso, José Castro, encausó a doña Cristina el pasado abril, las acusaciones recurrieron esa decisión, algo que, según ha indicado, «no es habitual». Además, la Audiencia Provincial de Palma finalmente anuló la imputación porque entendió que «no había indicios racionales suficientes», ha añadido.

Al referirse a la nueva imputación del magistrado contra la Infanta --por presunto delito fiscal y de blanqueo de capitales--, Armengol ha señalado que «normalmente, un tema que vaya sin el soporte de las acusaciones públicas es un tema que va bastante debilitado de cara a una hipotética acusación o condena».

Sin embargo, ha agregado que desconoce si han aparecido nuevos indicios en estos últimos meses sobre la participación de la hija del Rey en el impulso de la sociedad Aizoon --de la que es copropietaria junto a su marido Iñaki Urdangarin-- y sobre el supuesto fraude a Hacienda y los gastos en los que incurrió a través de esta mercantil.

UN AUTO MUY LARGO Y CON «RECURSOS RETÓRICOS»

Sobre el escrito redactado por el juez Castro, ha dicho que «no es normal» que tenga «tantos folios» (227), ya que los autos de imputación deben ser «muy escuetos» y estar «ceñidos exclusivamente a la descripción de los hipotéticos hechos que puedan ser probados» y a «las valoraciones jurídicas, pero de forma muy sucinta».

Por lo tanto, «todos esos recursos retóricos y ese tipo de comentarios» que figuran en la resolución sobre la actuación de la Infanta «sobran», ha concluido.

Por otro lado, Armengol ha subrayado la importancia de garantizar la presunción de inocencia de la Infanta y ha advertido de que «muchas veces es más perniciosa la condena de un medio de comunicación» que la que se pueda producir al término de un proceso judicial.

En este contexto, ha abogado por establecer «medidas de precaución, de vigilancia y de seguridad» para evitar las «situaciones de peligro» que se pudiesen producir en el momento en el que doña Cristina tuviese que ir a declarar ante el juez el próximo 8 de marzo, si es que se mantiene la imputación.