MALLORCA. HOTELES. LOS HOTELES DE MALLORCA SE PREPARAN PARA UNA NUEVA TEMPORADA TURISTICA . | Teresa Ayuga

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Con el mes de mayo ha empezado la temporada turística. En estos momentos hay 86.298 personas registradas como demandantes de ocupación en el sector servicios, un 9,56 % menos que en abril de 2013. Las demandas de ocupación han bajado en abril en todos los sectores productivos de Balears, excepto en agricultura y pesca, que ha notado un aumento del 18,18 %.

El número de personas inscritas como demandantes de empleo en abril es de 110.061, un 10,75 % menos que el mismo mes del año anterior, que terminó con 123.935 ciudadanos buscando un puesto de trabajo.

Así lo reflejan las estadísticas de demandantes de empleo inscritos en el Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB), recogidas por el Observatori del Treball que depende de la Direcció General d'Economia i Estadística que dirige Joana Aina Perelló.

Dentro del sector servicios las peticiones para conseguir una ocupación son: 33.051 de hostelería; 16.584 de comercio y 45.789 en el resto de servicios. Datos ligeramente inferiores a los registrados en el mismo período del año pasado.

Extranjeros

Desde el sindicato USO reucerdan que en Balears 12.000 personas han vuelto a sus países de origen, en el último año, ante la escasa oferta de trabajo para ellas en la Comunitat.

Los datos reflejan que las solicitudes de trabajo presentadas por extranjeros procedentes de países de la Unión Europea han disminuido un 15,53 % pasando de 8.875 en abril de 2013 a 7.496 este año. Lo mismo pasa con los trabajadores extranjeros extracomunitarios. En este caso, las demandas de ocupación han bajado todavía más, un 17,97 % pasando de 16.209 a 13.295 este pasado mes de abril.

Todos los sindicatos han reconocido que los datos de abril son buenos, pero han matizado que está aumentado la precariedad. «No es todo positivo como nos quieren hacer ver las voces que ya proclaman la recuperación económica», afirma Esperança Barceló, secretaria de Formación y Empleo de UGT. Barceló alude a la gran dependencia económica que tiene la Comunitat Autònoma del sector turístico.