Fina Santiago, Jan Gómez, Conxa Obrador y Josefina Ramis, durante la presentación de su propuesta. | M. À. Cañellas

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Los grupos parlamentarios del PSIB y MÉS y la asociación Ben Amics han registrado en el Parlament un proyecto de ley para garantizar los derechos de lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales (LGTBI) en el que reclaman políticas activas en contra de la discriminación y sanciones.

El presidente de Ben Amics, Jan Gómez, ha defendido la necesidad de que se apruebe en Baleares una ley específica para evitar la discriminación de dicho colectivo porque «para la sensibilización de la sociedad es necesario un marco jurídico y un marco legal que garantice un mínimo de derechos que sean exigibles».

«Queremos que se respete la diversidad», ha reclamado Gómez, quien considera «imprescindible» una ley que «garantice unos derechos mínimos al igual que al resto de la ciudadanía para dejar de ser ciudadanos de segunda», ha indicado en declaraciones facilitadas por el PSIB.

El presidente de la asociación considera que la aprobación del proyecto legislativo «sería un gran paso para el colectivo porque se siguen vulnerando derechos fundamentales como la atención sanitaria y prosiguen agresiones como el 'bullying'».

«Según el Ministerio del Interior, nuestro colectivo es el más agredido a día de hoy por delitos de odio y además un 20 % de la juventud de nuestro colectivo a intentado suicidarse en alguna ocasión por motivos de coso en la escuela», ha advertido.

La diputada socialista Conxa Obrador ha detallado que el proyecto de ley regula aspectos transversales de la vida de la ciudadanía y del colectivo LGTBI, abarca aspectos sanitarios, educativos y judiciales y propone medidas para evitar la discriminación en ámbitos como el deporte y la cultura.

Obrador considera necesario «un compromiso más firme de la administración en cuanto a la vulneración de los derechos del colectivo» y ha recalcado la importancia de que este proyecto incluye un régimen sancionador para las conductas discriminatorias.

Ha reclamado educación y prevención en el respeto a la diversidad pero ha insistido en que «es imprescindible que exista sanción».

Obrador ha explicado que, previsiblemente, el Parlament debatirá la toma en consideración de esta iniciativa en febrero y se ha comprometido a hacer «lo posible para que se debata y se apruebe en esta legislatura» o bien para que sea la primera ley que apruebe el próximo gobierno que salga de las elecciones autonómicas de mayo de 2015.

La diputada de MÉS Fina Santiago cree que registrar este proyecto de ley meses antes de las elecciones «puede ser una oportunidad para que la ley se apruebe aunque el PP no está demasiado a favor de este tipo de iniciativas».

Ha recordado que el PP en Galicia votó a favor de una ley de estas características «pero no incluyó sanciones de manera que quedó en una declaración de intenciones, y en Cataluña votó en contra». Además también rechazó una propuesta de apoyo al colectivo por las agresiones que sufre en Rusia que se debatió recientemente en el Parlament balear, ha dicho Santiago.

«Es una ley que quiere que se haga política pública a favor de estas personas y que no se discrimine por cuestiones sexuales», ha resumido Santiago, que ha pedido políticas activas de promoción de la igualdad.

A modo de ejemplos, Santiago ha indicado que una burla intencionada y discriminatoria por cuestión de orientación sexual podría motivar una sanción leve, sería de tipo medio si fuera repetida y muy grave si no se deja entrar a una persona en un local público por ser transexual.