Jaume Santandreu, junto a Catalina Cirer y Jaume Mateu, presidente de Can Gazà, | Teresa Ayuga

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Can Gazà inauguró este viernes sus nuevos talleres y la exposición permanente de muebles restaurados, ropa, libros, música, libros, etc, en el espacio que se ha habilitado en una nave del polígono de Can Valero después de tener que desalojar Sa Casa Llarga.

Marginàlia-Taller Can Gazà se anuncia a los visitantes con un ‘Utopías de segunda mano' y eso es lo que su líder, Jaume Santandreu, ofreció a los políticos que desde este viernes están en campaña, a los que hizo un llamamiento «para que pasen por aquí» y a los que también ofrecerá «palabras recicladas y otras en desuso como revolución o independencia».

La única que acudió a la inauguración del local fue la presidenta del IMAS, Catalina Cirer, organismo que paga 1.500 de los 3.000 euros que cuesta el alquiler de la nave, «que con el IVA y demás se nos pone casi en 4.000 euros mensuales», aclaró el exsacerdote.

La adecuación de la nave la han realizado por completo los responsables y beneficiarios de Can Gazà y en los talleres trabajan cerca de 20 usuarios de la entidad de atención a marginados.