Algunos de los vecinos denunciantes. | M.A.CAÑELLAS

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Vecinos del barrio residencial de la calle Fe explotan contra un local que les imposibilita el descanso a causa de los ruidos y actividades que hacen los asistentes al bar en horarios nocturnos. Los vecinos están recogiendo firmas y han presentado muchas quejas y una denuncia en el Ajuntament, pero la situación no mejora.

Este local, explica el portavoz vecinal, Toni Campos, normalmente abre los jueves y ya no cierra hasta el lunes vendiendo alcohol a un precio muy reducido según publicita la web.

«Hasta que no ocurra algo no se pondrá remedio», lamenta un vecino de la calle Fe de la Soledat que, como muchos otros residentes de la zona, están cansados de aguantar los ruidos, suciedad, peleas, violencia, insultos y escenas de todo tipo que ocasiona la clientela del bar ubicado en el número 7 de esa calle.

«Estamos cansados de llamar a la policía, a veces viene y otras muchas veces no, no sabemos qué más podemos hacer, un día se va a liar, haremos nosotros de policías y ya veremos qué pasa, lo estamos advirtiendo», secunda otro vecino.

Los afectados aseguran que no pueden descansar por la noche y que por las mañanas «los clientes que siguen ahí, totalmente borrachos, se meten con las niñas que salen de casa para ir al colegio o te tienes que apartar para que no te orinen encina».

Todos ellos esperan con la recogida de firmas y las denuncias presentadas ver pronto por ahí a algún responsable municipal que ayude a la seguridad y al descanso de los residentes de la calle.