Imagen de las tareas de demolición. | Gemma Andreu

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Ocho años después de paralizarse las obras de la aldea turística de Cala Llonga, este lunes han empezado los trabajos de demolición, por parte del BBVA, con la preparación del terreno y el traslado de las primeras máquinas, que está previsto que comiencen a derribar la estructura entre la tarde de este lunes y el martes.

La licencia de obras para acometer este trabajo tiene un plazo de seis meses y el presupuesto de las obras de demolición ronda los 400.000 euros.

Cabe recordar que el proyecto de Cala Llonga se remonta a noviembre de 2004, cuando el Ajuntament de Maó concedió la licencia a la empresa Cala Llonga Properties Development para edificar una aldea turística, con 38 viviendas. Tras detectarse un incumplimiento de la licencia, al superar la altura permitida, el Ajuntament de Maó paralizó en 2007 las obras. Posteriormente la promotora demandó a Maó con la intención de cobrar una indemnización de 1,7 millones de euros. El TSJIB dio la razón al Ayuntamiento. En mayo pasado el Consistorio dictó una orden de demolición del edificio, que debe ejecutar el BBVA, actual propietario del inmueble.