Escena de la pasada batalla de agua entre 'Canamunt i Canavall' en el Parc de la Mar de Palma. | P. Pellicer

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La batalla festiva entre Canamunt y Canavall, todo un éxito de participación en su primera edición, afronta este año el reto de consolidarse como un evento de referencia del verano palmesano, y para ello cuentan con varios ingredientes indispensables: una propuesta refrescante, «arraigada y popular, creada desde abajo con un fuerte trasfondo histórico, rebelde y friki».

Cabe apuntar que se trata de una fiesta autogestionada a partir de la venta de camisetas de los dos bandos. Éstas se pueden adquirir este jueves y viernes en la plaza de España desde las 18 horas.

Siguiendo estas premisas, la organización a cargo del colectivo Orgull Llonguet ha preparado un verdadero programa de actos festivos, que aún siendo provisional y sujeto a cambios, propone tres días de actividades que persiguen fomentar la participación.

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Así, según informan a través de su página de Facebook, el sus de la fiesta consistirá en una cena de los bandos donde se presentarán a los señores que comandarán cada facción, todo amenizado por música de ambiente.

El día de las 'hostilidades' los de Canamunt se concentrarán en la plaça Llorenç Bisbal, mientras que los de Canavall harán lo propio en la plaça Drassanes, antes de emprender una cercavila hasta el Parc de la Mar.

También se organiza para el mismo día una batalleta, donde los protagonistas serán los más pequeños.

Finalmente, el día después de la guerra acuática se prepara el enterro d'en Berga, que hace referencia al juez Jaume Joan de Berga, personaje histórico cuyo asesinato marcó las luchas entre los bandos nobiliarios rivales del siglo XVI en las que se inspira esta iniciativa lúdica.