El Govern balear ha explicado este martes que la prohibición, recogida en el Boletín Oficial de las Islas Baleares, tiene una vigencia de un año y pretende evitar «el peligro grave de propagación y dispersión» de la subespecie pauca de la xylella fastidiosa, detectada en Ibiza, una variedad «que muestra una patogenicidad muy elevada en el olivo y en el acebuche, pudiendo llegar a provocarle la muerte».
El ejecutivo autonómico, que ya había dictado la exportación de material vegetal del archipiélago, limita ahora el tráfico interno, aunque la resolución no afecta al material vegetal para plantación que haga escala en el puerto o aeropuerto de Ibiza, sino que se limita a las plantas cultivadas total o parcialmente en la isla.
La subespecie pauca, que se ha encontrado en una lavanda, una polígala y una acacia en la isla, hasta ahora no había sido detectada en Baleares.
Los positivos por xylella fastidiosa en Mallorca son de subespecies diferentes, la fastidiosa y la múltiplex.
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