Imagen de archivo de la manifestación el pasado fin de semana en Menorca contra el 'decretazo' del catalán en sanidad. | Gemma Andreu

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El Sindicato de Enfermería de las Illes Balears (SATSE) ha «confirmado» este miércoles la marcha de decenas de enfermeras de Baleares, principalmente de Ibiza, a otras comunidades autónomas ante la perspectiva de exigencia del certificado lingüístico del catalán.

En un comunicado, este sindicato señala que ha detectado los problemas que están teniendo ya varias gerencias del Servicio de Salud de Baleares (Ib-Salut) para contratar personal cualificado disponible, especialmente en el colectivo de enfermería.

La situación «más grave» se está viviendo actualmente en Ibiza y Formentera, donde la bolsa única de contratación de más personal se ha «agotado y ya no hay enfermeras disponibles para contratar».

El SATSE muestra su preocupación porque esta falta de enfermeras se produce en un momento en que la necesidad de contratación es menor y aún no ha llegado el verano, cuando la necesidad de personal sanitario es mucho mayor.

Este sindicato atribuye esta situación, además de a la escasez estructural de profesionales, al decreto del catalán que quiere aplicar el Govern balear.

Ante esta situación de escasez de profesionales, la gerencia sanitaria de Ibiza y Formentera está pidiendo a las enfermeras que hagan horas extraordinarias para cubrir las ausencias y «sortear así las carencias asistenciales que se producen».

Además, se está contratando a enfermeras que no están inscritas en la bolsa única de empleo «sin solicitarles ningún título de catalán; enfermeras que, por necesidades del servicio, están un día en una unidad y otro día en otra, afectando directamente a la calidad del servicio asistencial al paciente».

Según este sindicato, la situación es parecida en el hospital de Son Espases, que por las fiestas de Navidad está contratando al personal por vía de urgencia y también «fuera del mecanismo regulado de la bolsa única de empleo».

El SATSE afirma que «tampoco» hay disponibilidad en la bolsa de empleo de enfermeras especialistas en Salud Mental ni en Ibiza, ni en Formentera, ni en Menorca y que, este mismo año, se ha agotado puntualmente la bolsa de matronas.

Y todo esto ocurre, subraya el sindicato, cuando aún no ha entrado en vigor los requisitos lingüísticos.

Efectos

Los efectos del decreto lingüísticos serán «demoledores», ha advertido el secretario general de SATSE Illes Balears, Jorge Tera, que ha dicho que «ningún profesional cualificado admite que se le etiquete como de segunda clase, que es lo que está ocurriendo con el decreto del catalán».

«Las enfermeras -ha afirmado- son profesionales muy cotizadas en cualquier comunidad autónoma y, por supuesto, en el resto de Europa y por eso están empezando a marcharse, sobre todo aquellas con menos arraigo en Baleares».

Sin embargo, «los verdaderos efectos del decreto se verán en dos o tres años, cuando lo que ha sido hasta ahora un efecto llamada se convierta en efecto rechazo», ha augurado el máximo responsable de este sindicato.

El SATSE considera que «estar tramitando un decreto para excluir a profesionales cualificados del acceso al empleo público en una situación como ésta es una irresponsabilidad», y pide a la presidenta del Govern y a la consellera de Salut «que den marcha atrás y que no permitan que un criterio político impuesto por el socio minoritario ponga en peligro la asistencia sanitaria».