Plancha de José Ramón Bauzá al apuntarse el tanto del descuento aéreo

José Ramón junto a Iñigo de la Serna.

Joan RieraPalma03/04/18 20:39
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Dicen el el PP que José Ramón «hace lo imposible para hacer ver que mueve los hilos en Madrid. Pero esta vez ha demostrado que no se entera de nada y que todo es pura filigrana y humo». Resulta que el pasado 12 de marzo incluyó en su twitter una foto con el ministro Iñigo de la Serna en la que, en apariencia, compartía confidencias, y un texto en el que indicaba 'comparto con el ministro Iñigo de la Serna la importancia de aprobar el descuento del 75% para residentes en Baleares. Estamos preocupados por la irreponsabilidad de partidos que, al negarse a la aprobación de los presupuestos, puedan impedir la aplicación de la medida'´.

En la sede del PP se desternillan de risa. Primero porque los descuentos del 75% no se han incluido en estos presupuestos a la espera de convertirse en un caramelo en la negociación con los nacionalistas canarios (de los baleares pasan). Y segundo porque Bauzá escribió su twitter en primera persona del plural, como si fuese uña y carne con De la Serna. Todo era un juego de manos twitero. Propaganda barata. Nada más.

«¡Vaya fanasma!», dicen en el PP. «Si de verdad hubiera hablado de este tema con De la Serna y el ministro hubiera tenido confianza en él, sabría que el 75% no se iba a incluir y no habría escrito este twitter de autobombo. Bauzá se ha tirado una plancha fenomenal», se comenta en Palau Reial. La conclusión a la que han llegado miembros de la dirección de este partido en Baleares es que «aparte de poses y mensajitos, ni se entera de nada ni le tienen confianza, ni ejerce ninguna influencia».

También se comenta que «ésta será su última legislatura como senador autonómico», explicando que «tampoco conseguirá hacerse paracaidista, consiguiendo un puesto en una lista de otra comunidad y, ni mucho menos, será eurodiputado. Ya ha armado demasiados líos». La foto (que parece decir mucho) con De la Serna y el mensaje (que es un gazapo) es la prueba para el PP de que José Ramón es en Madrid «poco más que un convidado de piedra».