Se trata de una moción presentada por PSIB, MÉS, Podemos y el PI y ha sido aprobada con los votos en contra del PP, según ha informado el Grupo Socialista en una nota de prensa.
El objetivo es que «la ciudadanía de Mallorca conozca el problema de la mala financiación» y sepa lo que está en juego «como sociedad», en palabras del conseller socialista Javier de Juan.
De Juan ha recordado que Baleares «está a la cola en inversión estatal» y «es la segunda comunidad en aportar y la novena en recibir recursos», lo que «provoca gran parte de un deuda histórica que llega alrededor de los 9.000 millones de euros».
Por ello, a criterio de los socialistas es necesario un nuevo sistema de financiación «que sea estable, que garantice la autonomía financiera y que quede blindado constitucionalmente». Sin embargo, todavía no ha llegado porque «la reivindicación del buen financiación ha encontrado el principal obstáculo en la falta de voluntad del Gobierno de Rajoy, que hasta ahora sólo ha retrasado el proceso para emprender esta reforma partiendo de excusas».
«La financiación no ha sido prioridad para el PP, porque ha optado por la recentralización desde el punto de vista competencial y económico y usar el sistema de financiación para conseguir sus objetivos, jugando con los derechos y servicios que recibe la ciudadanía», ha denunciado De Juan.
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