Este acuerdo fue rubricado en la noche de este miércoles después de que a mediados del pasado marzo el Sepla acusara a la compañía aérea de negarse a garantizar los puestos de trabajo de sus tripulantes de la base en Mallorca, al anunciar su cierre para abril y un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
«Las tres partes han llegado a un acuerdo general con un conjunto de medidas que buscan minimizar, en la medida de lo posible, el impacto del cierre de la base», ha indicado la aerolínea en un comunicado.
La aerolínea noruega anunció el cierre, después de que el Sepla y USO rechazaran su oferta de mantener todos los empleos de Palma mediante el traslado de sus trabajadores a las bases operativas en la península, más una suma en compensación por el coste del cambio.
En febrero, Norwegian informó a los sindicatos de su intención de iniciar el preceptivo período de consultas para la instrucción de un procedimiento colectivo de movilidad geográfica, que iba dirigido, además de a los tripulantes adscritos a la base de Palma, a los de Gran Canaria y Tenerife Sur, que también tiene previsto cerrar este año, pero más adelante, en noviembre.
Según Norwegian, las medidas propuestas ofrecen a los tripulantes basados hasta la fecha en Palma (tanto pilotos como TCP) un abanico de opciones como el cambio en las pautas de trabajo, beneficios sociales, compensaciones por mudanza y facilidades en las suspensiones de contrato, las reducciones de la jornada laboral y la solicitud de excedencias voluntarias.
Además, y de acuerdo a Norwegian, se les ofrecerá la posibilidad de cambiar de base operativa y de flota de acuerdo con las condiciones específicas establecidas en el acuerdo.
«Norwegian considera que el acuerdo es positivo para todas las partes involucradas y cree oportuno reconocer a USO y SEPLA por el resultado obtenido», ha apuntado.
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