Otras zonas de Palma muy afectadas por este tipo de oferta son la Plaza de las Columnas y Emili Darder, aunque precisan que está repartida por toda la ciudad.

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La asociación Juguesca y la FAPA denuncian el aumento de la oferta de juego que se ha producido en Palma. Como ejemplo, señalan que solo en Pere Garau han contabilizado 22 puntos de oferta (bingos, administraciones de lotería, puntos de venta de la ONCE, apuestas deportivas y salones de juego ).

Otras zonas de Palma muy afectadas por este tipo de oferta son la Plaza de las Columnas y Emili Darder, aunque precisan que está repartida por toda la ciudad.

La presidenta de Juguesca, Antonia Miralles, responsabiliza de esta situación al decreto autonómico que permite la apertura de casas de apuestas deportivas y salones de juegos.
El director de FAPA Mallorca, Miguel Ángel Guerrero, destaca que Palma tiene un 40 % más salas de juegos y apuestas por habitantes que Madrid. En concreto, en Palma hay 70 casas de juego. A estas modalidades hay que sumar otras ofertas de juego como los bingos, la ONCE, etc.

Guerrero también advierte del riesgo que supone la presencia de este tipo de locales en las inmediaciones de los colegios. La normativa autonómica establece que no pueden estar a menos de 100 metros de los centros escolares, pero la FAPA y Juguesca solicitan al Ajuntament de Palma que incremente las restricciones, ya que tienen competencias para ello.

Además, piden que limite más el horario de apertura. «Las licencias las concede el Ajuntament de Palma y pueden añadir otras restricciones a las existentes», señala Guerrero.

La presidente de Juguesca precisa que han detectado un incremento de las personas con problemas de ludopatía que acuden a ellos. El perfil mayoritario es el de hombres con edades comprendidas entre los 20 y los 35 años y hay más españoles que de otras nacionalidades.

Cs pide a Cort que cumpla las medidas aprobadas en el pleno

El pleno ha aprobado tres propuestas para limitar la oferta de juego en Palma, presentadas por Cs y esta formación exige al Pacte que las cumpla. Una de ellas pide al Govern una moratoria a estos locales hasta que Madrid lo regule. Otra insta a no abrir establecimientos de este tipo cerca de institutos, centros escolares y parques. La tercera pide que los nuevos caminos escolares eviten pasar por estos locales.