La empresa que se va a encargar de llevar a cabo este nuevo Plan de Fosas será ATICS, que lleva 27 años dedicada a la arqueología. En el año 2000 hizo una «apuesta clara» por trabajar sobre la Guerra Civil y la Memoria Democrática. | Joan Socies

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El segundo plan de fosas del Govern contempla nueve intervenciones en ocho municipios de Mallorca y Eivissa a través de las que se prevén hallar restos de al menos 40 personas, según la documentación y los estudios preliminares. Así lo indicó ayer la consellera de Administracions Públiques i Modernització, Isabel Castro, quien presentó el plan 2019-2020 junto al secretario autonómico de Memòria Democràtica i Bon Govern, Jesús Jurado. En la presentación estaban también representantes de los ayuntamientos de donde se llevarán a cabo las intervenciones y de la empresa encargada, que en esta ocasión será ATICS.

El plan cuenta con un presupuesto de 443.000 euros y la primera tarea que se impulsará es la calendarización de las actuaciones con los municipios afectados. Aunque todavía no hay fecha de inicio para la tarea de campo, se espera que «se pueda iniciar dentro de poco tiempo», en palabras de Jurado. En concreto, a lo largo de este año se actuará por primera vez en lugares emblemáticos como Son Coletes, en Manacor; el cementerio de Bunyola, el de Valldemossa y un horno de cal del collado de Artà-Salma, mientras que también se incluyen segundas actuaciones en Sencelles, en Porreres (en la zona ajardinada), en ses Figueretes (Eivissa), en el Pou de Son Lluís de Porreres y en el cementerio de Santa Maria.

Asimismo, el plan incluye la elaboración de un informe antropológico detallado de 35 cuerpos exhumados en la fosa de Porreres, y no identificados por prueba de ADN, durante la intervención realizada en noviembre de 2016. Este informe debe aportar características físicas de cada uno de los individuos que permitan determinar la edad y todos aquellos aspectos que den información sobre su identidad. Finalmente, la tercera línea de trabajo del plan encarga un estudio histórico sobre el cementerio nuevo de Sant Francesc Xavier, en Formentera, para plantear futuras intervenciones en el citado espacio.

«Se deben cerrar heridas para continuar adelante como sociedad», dijo la consellera, para quien estas actuaciones suponen «justicia para las víctimas». «Hablamos de dignidad», concluyó.