Toni Bonet con su familia americana, desde Houston.

TW
3

Estados Unidos se ha convertido en el epicentro de la pandemia del coronavirus con más de 180.000 contagios. Esta situación histórica la está viviendo de primera mano el mallorquín Toni Bonet, de 16 años, estudiante de intercambio en un instituto de Houston, en Texas.

Su madre, Claudia, asegura que él está «muy bien» con la familia americana que le acoge durante su estancia. El confinamiento para este joven comenzó hace unas cuantas semanas tras una desagradable experiencia con la agencia que contrataron.

«Nosotros contactamos directamente con una compañía de Estados Unidos desde Mallorca para tramitar el intercambio de Toni y estamos muy contentos con la agencia, pero hace una semana la jefa nos bombardeó con mensajes electrónicos diciendo que nuestro hijo tenía que irse del país. Le dijimos que nuestra decisión era que se quedara allí, con esa familia de Houston, por precaución. Su respuesta fue que esto no era una opción, sino una orden».

Claudia asegura que han tenido una semana de lucha constante para que Toni pudiese permanecer en el país. El instituto también se involucró con el menor y «nos dijo que harían lo que estuviese en sus manos», expresa la madre. Esta decisión la tomaron después de que en Estados Unidos la situación se volviese muy crítica en cuanto al número de contagiados: «Analizamos la situación y vimos que para volver a Mallorca tenía que hacer tres escalas. No queríamos que nuestro hijo se expusiera». En este sentido, la agente consular de Estados Unidos en Balears, Kimberly Marshall, ha concretado a Ultima Hora que «algunas agencias, privadas, americanas dan esta recomendación a los estudiantes porque la situación allí es incierta, pero no pueden obligar a nadie a volver a sus países de origen».

Situación

La familia de Toni también solicitó información a agencias de viajes. En general, cuenta Claudia, «nos desaconsejaron seriamente que nuestro hijo volviese a España, ya que no garantizaban que hubiera vuelos o que llegara al destino final. Corríamos el riesgo de que se quedase colgado en algún aeropuerto del mundo». La madre asegura que el billete de avión no bajaba los 3.500 euros.

Noticias relacionadas

En América, los ciudadanos pueden salir a pasear o a correr. Esta imagen no solo la cuenta la madre de Bonet en boca de su hijo. Desde Boston, Massachusetts, el mallorquín Juanjo Garau, de 25 años, corrobora esta situación. «Aquí, a diferencia de España, el gobierno no ha decretado confinamiento obligatorio, sino que ha pedido a los ciudadanos que trabajen desde casa, pero aún podemos salir».

Juanjo está finalizando un máster en ingeniería aeroespacial en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Cuando sale a la calle, ve a muchos jóvenes. «No hay alarmismo excesivo entre la población, pero no sé hasta qué punto eso nos perjudica». Él no quiso regresar a Mallorca «porque hay personas de mi familia que son vulnerables y no quería arriesgarme si era portador de la enfermedad».

Este estudiante realizó unos cuantos viajes cuando empezó la psicosis por el coronavirus. «Quieras o no, la paranoia de contraer el virus se te mete en la cabeza. Por suerte, no he desarrollado ningún síntoma y puedo hacer vida normal», asegura. Ahora está involucrado con la ola de iniciativas solidarias. Hace días que proporciona en sus redes sociales material para aprender a programar con Python. Cada dos días comparte un notebook en Google Colab sobre conceptos específicos. «Llevaba años defendiendo que la programación debería tener importancia en el currículum escolar» y ahora ha visto el momento.

El Consulado ayudó a 600 americanos

La agente consular de Estados Unidos en Balears, Kimberly Marshall, lleva trabajando con las autoridades españolas para dar servicio a los residentes americanos en la Isla y coordinando las repatriaciones de visitantes que se encuentran en Balears desde los inicios de esta situación.

Según la agente, ha habido bastante petición por parte de los estadounidenses. Hasta la fecha, «hemos atendido cerca de 600 ciudadanos», y asegura que en todo momento han proporcionado información y aconsejado a los residentes, y a empresarios americanos, qué hacer ante un escenario como éste y cuáles son las vías para regresar a América.

PALMA - ENTREVISTA A KIMBERLY MARSHALL, AGENTE CONSULAR DE LOS ESTADOS UNIDOS.