Messi adquirió a través de una sociedad patrimonial el hotel de cuatro estrellas Fona Mallorca situado en s’Illot.

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Un acuerdo zanja la demanda por despidos improcedentes en el hotel Fona Mallorca, del que es propietario ahora el futbolista Leo Messi a través de una sociedad gestionada por su hermano Rodrigo. La mercantil que vendió el establecimiento de cuatro estrellas de s'Illot, Biniaraix SA asume ahora que los despidos que llevó a cabo en febrero del año pasado no estaban justificados por causas económicas y acepta indemnizar a los dos trabajadores demandantes con 16.621 euros a cada uno.

El acuerdo tiene ahora que ser homologado por el Juzgado de lo Social 2 de Palma, lo que supone un mero trámite y deja fuera del procedimiento a Explotaciones Rosotel SA, la empresa desde la que el futbolista gestiona el hotel. Así, no tendrá que comparecer en el juzgado ni entregar la documentación que ya se le había solicitado sobre cómo se fraguó la adquisición de la propiedad. El juzgado también había citado a declarar en la vista al hermano de Messi.

La venta del hotel y los despidos se produjeron de forma cercana en el tiempo a principios de 2019. En total fueron seis los empleados a los que se extinguió la relación laboral por causas objetivas, basada en un supuesto escenario de pérdidas económicas en los tres ejercicios anteriores a la venta.

La demanda planteaba que la empresa había omitido la obligación de presentar un concurso de acreedores si esa era su situación financiera real y, por lo tanto, dudaba de la realidad de esas causas objetivas, que tienen que ser acreditadas por la empresa que las esgrime durante el procedimiento en el juzgado. También se solicitaba documentación sobre la situación de todas las empresas vinculadas con la gestión y alquiler del hotel en los últimos años.

La demanda inicial de los trabajadores, representados por el letrado Pablo Alonso de Caso, se había ampliado a los nuevos propietarios del hotel. La base de la reclamación es que los despidos, en realidad se produjeron después de que los trabajadores afectados plantearan una demanda anterior en la que reclamaban una serie de atrasos.

La reclamación y la vía judicial quedan cerradas en la práctica con el acuerdo que fue notificado ayer al juzgado de lo Social. Los trabajadores recibirán la indemnización acordada en el plazo de cinco días.