El plan aborda el componente emocional en la actividad académica. | Carlos Barba - jmv - EFE - EFE

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La Conselleria d'Educació, a través de la Direcció General de Primera Infància, Innovació i Comunitat Educativa, y el Institut per a la Convivència i l'Èxit Educatiu (Convivèxit), ha puesto en marcha para el próximo curso un plan de retorno a las actividades educativas presenciales con la finalidad de cubrir los aspectos socioemocionales del alumnado, las familias y el profesorado.

Sus responsables, Amanda Fernández, Jaume Font, Aina Amengual y Cati Ensenyat, explicaron este lunes que el plan ofrece cuatro tipos de recursos para la atención psicosocial: previsión de espacios de acogida, herramientas y recursos para la mejora del bienestar emocional, estrategias de identificación y ayuda ante el impacto psicosocial, y seguridad y buen uso de las tecnologías.

En palabras de sus responsables, «se trata de que alumnos, familias y docentes tengan sus espacios para reflexionar y expresar cómo se sienten emocionalmente para afrontar las especiales circunstancias de este curso y qué pueden hacer para estar mejor. A través de estos recursos, se crean canales de comunicación y se pueden establecer vínculos entre todas estas partes de la comunidad educativa, siendo especialmente importante la implicación y la participación de las familias».

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Jaume Font, como director de Convivèxit, concedió una especial importancia a que «estos recursos permiten enseñar competencias no sólo para el propio cuidado emocional, sino para el cuidado de los demás, la solidaridad y la empatía. Todo ello incide en una mejora del rendimiento académico».

Este trabajo en el componente emocional del retorno a las aulas evidenciará la capacidad de las partes para afrontar la situación o determinar si se necesita una atención más profesionalizada. También servirá para detectar señales indicadoras de ciberacoso.
Atención telefónica

Más allá del plan, la Conselleria de Salut habilitará una línea de atención telefónica específica para el bienestar emocional en el ámbito educativo.
Los responsables del plan son conscientes de que la disparidad de casos puede ser muy amplia, «pero una inversión de tiempo para la reflexión sobre las cuestiones emocionales puede evitar conflictos más importantes en el futuro».