Para controlar las aglomeraciones, Cort ha cerrado el árbol de Navidad instalado en el Parc de la Mar. | Teresa Ayuga

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El mensaje de este domingo de la presidenta del Govern, Francina Armengol, alertando de que se acerca una tercera ola de coronavirus en Baleares, anticipa nuevas restricciones y limitaciones de movilidad que este lunes se darán a conocer tras su aprobación por parte del Consell de Govern. Está sobre la mesa el cierre del interior de bares y restaurantes.

Los miembros del Govern estuvieron a lo largo de todo el domingo en contacto permanente para decidir si Mallorca entra o no en la fase de riesgo máximo, el nivel cuatro, o si solo lo hacen las zonas donde el grado de afectación de la COVID-19 es muy elevado. Se considera fase de riesgo a partir de 250 casos acumulados en 14 días por cada 100.000 habitantes, un cifra que se da en casi la mitad de los municipios de Mallorca, según datos del día 10. Sin embargo, también deben darse otros factores relacionados con la ocupación de hospitales y de camas UCI, donde los datos son buenos.

Mallorca, en riesgo extremo, sometida a las restricciones más duras desde el confinamiento Mallorca, en riesgo extremo, sometida a las restricciones más duras desde el confinamiento

El nivel cuatro de alerta sanitaria implica en el plan anunciado en su día el cierre del interior de los establecimientos, confinamientos perimetrales, reuniones de seis personas pero solo en el exterior, prohibición absoluta de fumar en la calle y los comercios quedan al 50 por ciento de aforo.

Las Navidades

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Una de las restricciones que será clave es la de limitar las reuniones a seis personas porque, si la medida dura 15 días, como es habitual, afectará de lleno a las reuniones familiares de los días 24 y 25 de diciembre, donde en teoría podrían reunirse hasta 10 personas.

El Govern ha rechazado hasta el momento el cierre perimetral de algunas de las Islas, algo que tendría consecuencias en la movilidad de las personas durante las Navidades, pero Canarias lo acaba de aprobar para la comunidad.

En el Ejecutivo balear han saltado todas las alarmas por el aumento de los contactos. El frío ha provocado que reuniones que antes se hacían en el exterior se hagan en el interior, lo que ha ayudado a la propagación de los contagios.

La presidenta del Govern ha convocado de urgencia a la Mesa de Diálogo Social, donde se sientan patronal y sindicatos, para explicarles esta mañana las nuevas restricciones que se pondrán en marcha este martes.