De los objetivos de esta agenda que se refieren a la sostenibilidad ambiental, uno es «garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todas las personas», mientras que otro apunta a «lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles». Además, se encuentra entre ellos el de «adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos».
Proyectos
Por este motivo en Baleares se han puesto en marcha una serie de proyectos con los que alcanzar estos objetivos. Entre otros, hay un Plan de Rehabilitación Energética de Edificios (PREE) que tiene como fin «la mejora de la eficiencia de los hogares de la comunidad», según explicó el vicepresidente del Govern y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes. Esto «permitirá impulsar la transición energética y conseguir los objetivos de descarbonización contemplados en la Ley de Cambio Climático balear». De momento, el Govern ha recibido 72 solicitudes, 48 en Mallorca, lo que supondrá una inversión de 4 millones de euros.
El que sin duda ha sido uno de los grandes logros en la lucha contra la contaminación ha sido la retirada de los plásticos de un solo uso. En Baleares, en marzo, entró en vigor una ley autonómica que erradica este tipo de artículos ante la preocupación que generan este tipo de residuos que se calcula que tardan entre 100 y 1.000 años en descomponerse.
Con el objetivo de promover el desarrollo sostenible y la protección del medio ambiente nació eMallorca Challenge, una iniciativa que los días 3, 4 y 5 de junio celebra su segunda edición. Este proyecto multidisciplinar apuesta por una construcción menos contaminante, un turismo sostenible, energías limpias a partir de la carbonización… En resumen, acciones que ayudan a la preservación del planeta.
Turismo en Baleares
Uno de los sectores que más se está poniendo las pilas en este campo, y que es uno de los pilares de la economía en Baleares, es el turismo. Tanto es así que el Consell de Mallorca presentó ante la Organización Mundial de Turismo (OMT) la candidatura para acoger un Observatorio Mundial de Turismo Sostenible. Esta iniciativa nace de la voluntad de conocer cómo afecta la actividad turística al medio ambiente, a la economía y a los residentes.
Con todo, queda claro que no tanto el futuro sino el presente pasa por la sostenibilidad ambiental, que permita una actividad respetuosa con la naturaleza. La conservación del entorno, tan preciado por residentes y turistas, es vital en en unas islas que viven de ello.