La secretaria general de la Conselleria, Catalina Inès Perelló, explica que «el objetivo de la ley es establecer la naturaleza jurídica, las potestades y las funciones de los agentes de Medi Ambient en sus funciones de vigilancia, inspección, custodia y control de los bienes forestales y medioambientales. Son funcionarios que tienen la consideración de policía administrativa especial y también de policía judicial. Por tanto, son autoridad, pero no tienen capacidad sancionadora».
En este sentido, los agentes, creados en la legislatura 1999-2003 y actualmente con unos 70 efectivos en todas las Islas, pueden levantar actas y denuncias ante presuntas infracciones urbanísticas o medioambientales, pero, para que se abran los procedimientos sancionadores, deben trasladarlas a los organismos competentes, como por ejemplo el Consell de Mallorca, la Demarcación de Costas o los propios servicios de la Conselleria de Medi Ambient i Territori.
Una de las principales novedades de la ley radica, según explica Perelló, en que «el levantamiento de actas por parte de los agentes iniciarán siempre de oficio los procedimientos sancionadores a todos los efectos y ello significa que los plazos empezarán a contar. No será necesario esperar el traslado de las actas a los organismos competentes, lo que representa una agilización del proceso».
En cualquier caso, el acta levantada por el agente deberá hacer constar, entre otras cuestiones, la identificación de la persona denunciada, una descripción breve del hecho (detallando lugar, fecha y hora), número de identificación profesional del agente, la cuantía de la sanción que pueda corresponder y el órgano competente para imponerla, si es que cabe aplicar la multa.
7 comentarios
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Las pandemias suelen acompañarse de un recorte de libertades y de un aumento de autoritarismo. Por otra parte, Ibanat sería más eficaz si no tuviera que ocuparse del sector parahostelero del Govern. Las autoridades predican el cambio de modelo turístico, pero gestionan centenares o miles de camas, comom un hotelero más y sin mucha originalidad económica.
Pués los parques públicos están llenos de campistas y no les pasa nada.Ah claro, solo se sanciona al que tiene algo donde rascarle...
Si no son agentes de la autoridad como van a sancionar??? Que avisen al Seprona y se dejen de creerse los dueños del mar y la montaña.
No poder dormir a la muntanya, o a la platja, exercint la llibertat individual sembla més típic d'un Estat totalitari. Pot ser existeix una raó per totes aquestes prohibicions, però estaria bé que fessin un exercici de pedagogia per a explicar-ho per què sancionar i frustrar a la gent sense cap tipus d'explicació, més enllà de que està prohibit, no ajuda gens.
Solo les faltaba más poder...ya para alguno de ellos volverse loco. La persecución en Mallorca ya es una realidad para todo tipo de amantes de la naturaleza. A este govierno de millenials los va a votar su madre.